Cuando me enteré que Google haría un sistema operativo que pudiera ser instalado en cualquier dispositivo la idea me emocionó.
Google es una empresa con suficientes recursos para poder hacerlo y en pocos años Android se convirtió en el sistema operativo de casi cualquier celular, un éxito comparable al de Windows en su época.
Dos años después de que se anunciara mi celular, el LG G3, el mejor teléfono de LG en 2014… no ha recibido ni una sola actualización de software.
Como aficionado de la tecnología me importa siempre tener las últimas características de un sistema o aplicación tan pronto están disponibles.
Instalé Windows 10 desde que estaba en periodo de pruebas, instalo Mac OS el mismo día que sale. Puedo no vivir con lo más nuevo porque es un capricho, excepto cuando no lo es.
La seguridad en nuestra época es mejor que nunca y peor de lo que va a ser mañana.
Cada día se descubre que Flash o Java tienen una nueva vulnerabilidad, aunque lo anterior no es de extrañarse lo mismo sucede con cientos de productos y servicios que usamos, incluso hay vulnerabilidades tan grandes que son al nivel del sistema operativo.
Cuando estos problemas de seguridad son encontrados es importante resolverlos inmediatamente, por eso es que hay tantas actualizaciones que incluyen “Mejoras en seguridad” o cualquier variación del concepto que exista, alguna app puede arreglar un problema de seguridad por medio de una actualización en la Play Store pero los problemas a nivel de sistema operativo son para siempre.
¿Para siempre?
Quizá exagero pero comparemos… al momento de enviar una actualización de iOS la puedes descargar el mismo día que sale a menos que tu dispositivo ya no esté soportado, en Android pueden pasar años.
El LG G3 no es cualquier teléfono, es el mejor teléfono de LG de hace 2 años, de fecha similar al iPhone 5S.
En este periodo de tiempo el iPhone 5S de finales de 2013 ha recibido 2 actualizaciones de software grandes y docenas de actualizaciones pequeñas, mi teléfono ninguna, ni de las chicas.
Tengo un amigo que solía decir que nunca tendrá teléfonos hechos por empresas que hacen refrigeradores.
Las empresas que hacen refrigeradores podrán ser buenas empresas de hardware pero no son empresas de software.
El soporte de LG también es terrible, buscar en Google el software de escritorio de LG lleva a resultados regionales (España, Reino Unido, México) con modelos incosistentes (D850, D581, D585, D580S) y todos esos resultados me llevaron a páginas que ya no estaban disponibles.
Si usas Mac OS el software de LG es 10 veces peor que en Windows.
Cuando Google lanza una actualización para Android le da oportunidad a los fabricantes (HTC, LG, Samsung, etc.) de agregarle cosas para que funcione en sus dispositivos, drivers para la cámara o la pantalla pero también aprovechan para meter un montón de software que creen conveniente.
Los fabricantes tienen tantos modelos de teléfonos que deben decidir cuales actualizarán, usualmente los más caros y los más vendidos, si el modelo no es popular o prioridad para el fabricante irá hasta el final si tuvo la suerte de no ser abandonado ya.
Los fabricantes tardan meses en preparar Android en los teléfonos nuevos, aquí se agrega la primera dosis de bloatware.
Después pasan esa actualización a los vendedores (Telcel, ATT, Movistar) que tardan más meses en agregar más bloatware para después entregarlo a los consumidores.
El bloatware es software que no sirve, viene en forma de apps o componentes que el fabricante o vendedor agrega para diferenciarse de los demás, la mayoria del tiempo es softare que:
Hay cosas interesantes en el software de terceros, en mi celular puedo activar la pantalla con hacer doble tap cuando está apagada pero en estos días es más fácil encontrar algo malo que algo bueno.
¿Lo malo?
Como LG quería que la sección de notificaciones fuera diferente le agregaron cosas pero no colocaron el botón para encender el LED de la cámara, cosa que Android tiene por defecto.
Como ATT quería tener acceso a mis contactos cada que quiero verlos recibo una notificación indicándome que hubo un problema al sincronizarlos con ATT.
Una de las cosas que me agrada de Android sobre iOS es el patrón de desbloqueo. LG quería tener un look especial en el patrón de desbloqueo por lo que al encriptar el teléfono pero eso interfiere con la seguridad, si quieres encriptar un LG G3 sólo lo puedes desbloquear usando un PIN o una contraseña.
El patrón de desbloqueo no está disponible por cuestriones de seguridad, porque no es nativo, porque LG quería ser diferente.
Tengo 2 aplicaciones de reloj, una de LG y la oficial de Google, porque LG quería ser diferente.
Claro, la mayoría de teléfonos Android son más baratos que un iPhone pero la experiencia es muy diferente, a menos que quieras estar comprando el mejor Android cada 18 meses.
Comprar Nexus no es una opción. Google no vende Nexus directamente en México y los vendedores agrega precios muy elevados o los venden exclusivamente en planes.
Han pasado 2 años desde que LG actualizó el software de mi teléfono.
Por una burocracia tremenda entre Google, LG y ATT usar Android no ha sido más que una experiencia dolorosa, aún cuando usaba un Moto G que es mucho mas light no me libré del problema, las actualizaciones vienen meses después.
Google tiene que resolver su problema de software ya. Desafortunadamente este año no anunciaron nada relacionado.
Google tiene el poder de ignorar a los carriers, a los fabricantes, es hora de que empiecen a poner sus propias reglas. ¿Creen que los fabricantes van a hacer su propio sistema operativo? ¿Van a usar Windows Phone?
En esta época es más importante cuidar la seguridad y consistencia de tu sistema operativo que preocuparse por si el próximo se va a llamar Nutella.
Publicado por Julio Montaño el 27/Jun/2016.