A lo largo de mi vida profesional he tenido la fortuna de trabajar con personas amables, que les interesa lo que hacen, que me respetan y que quieren lograr un bien común.
A pesar de lo anterior mentiría si dijera que sentí una conexión real con estos equipos. Trabajamos juntos, creamos cosas geniales y aprendimos entre todos pero en Mazing Studio fue diferente.
Momentos felices, tristes, con estrés, interesantes… todas estas cosas fortalecen relaciones entre personas, en un trabajo las vas a encontrar y mientras más tiempo pasas en él más situaciones memorables vivirás.
En Mazing viví todas esas experiencias, me tocó aprender y enseñar, tomar la cabeza del equipo en los momentos necesarios y sufrir mucho cuando las cosas no salían, todas estas experiencias me hicieron aprender y ser un mejor desarrollador… que son las cosas que más deseo en la vida.
A lo largo de mi poco más de 1 año con el equipo de Mazing encontré algo así como una familia, personas con las que me gustaría seguir trabajando por siempre, haciendo proyectos interesantes, que me reten y hagan aprender.
Hace una semana empecé a trabajar con otro equipo y… es difícil, es muy difícil adaptarse a la forma de trabajo, lugar, personas y demás factores que implican tener un nuevo trabajo.
Estoy seguro de que muy pocas personas tienen la suerte de encontrar un equipo así en su vida, yo la tuve, yo conozco a un equipo ideal.
Publicado por Julio Montaño el 9/Mar/2017.