Hace varios días tomé la decisión de desactivar mi Facebook, la razón real es que dejé de hablar con la persona que más hablaba usando Facebook y aparte de eso, no lo usaba para mucho.
No tengo idea de cuando lo desactivé ni de cuando lo reactivé pero estimo que fueron alrededor de dos semanas las que no tuve Facebook. ¿Qué sucedió?
Tuve más tiempo. De alguna forma, aunque no hablara con nadie, me la pasaba viendo las últimas noticias de mis amigos y las páginas que seguía, cada 10 minutos abría Facebook por un minuto, a veces más.
Analizando más a fondo mi relación con Facebook, creo que llegué a pasar más de 2 horas al día revisando Facebook, hablando con otras personas, viendo noticias, imágenes, fotos y más.
Muchas personas que conozco y con las que hablo afuera de Facebook me preguntaron si las había eliminado de mis amigos o había decidido bloquearlas.
Mis contactos creyeron que los bloqueé o eliminé.
Es interesante como las personas asumen inmediatamente que no dejé de tener Facebook y en su lugar, piensan que solo no quería hablar o tener algún contacto con ellos.
Las personas que querían o necesitaban comunicarse conmigo buscaron la forma, de hecho, no es muy difícil encontrarme si buscas mi nombre en internet. La mayoría de los nuevos contactos fueron por WhatsApp, Twitter y email.
También era esperado, y sucedió, que me perdí de algunas cosas, algunos eventos y de hecho, no asistí a una reunión que se coordinó por Facebook. Asumieron que iba o no lo tomaron en cuenta pero me enteré de la reunión cuando me preguntaron por qué no fui.
Spotify me expulsó, cuando creé mi cuenta usé lo que me pareció en ese momento una buena idea, registrarme con Facebook. A la semana de cerrar mi Facebook todos mis dispositivos con Spotify dejaron de funcionar. No hubo forma de usar Spotify con mi correo electrónico ya que esa cuenta fue creada con Facebook por lo que creé una nueva cuenta de Spotify. El problema es que no puedes borrar una cuenta de Spotify sin contactar al soporte, realizar un trámite, explicar tus razones y más cosas. Es increíble que un servicio tan grande como Spotify tenga tantos problemas de experiencia de usuario como éste. Mi cuenta anterior sigue existiendo.
No puedes borrar una cuenta de Spotify sin contactar al soporte.
Muchos de los otros servicios que uso también los registré con Facebook y me llegó a molestar el que después de “Registrarme con Facebook” aún me pidieran una dirección de correo y en ocasiones, contraseña, ahora entiendo que es un buen camino el que dichos servicios decidieron tomar, mejor aún, algunos de los que no pedían contraseña presentan la opción de “recuperar contraseña”, una contraseña que nunca existió pero puedo obtener para no depender de Facebook para usar un servicio.
Las apps de Facebook y Facebook Messenger en mi computadora, iPad y Lumia cerraron sus respectivas sesiones, desde que reabrí mi cuenta no he vuelto a iniciar sesión en mis dispositivos, solamente en la versión Web. Tengo la impresión de que eso me ayuda a distraerme menos.
Finalmente, lo reabrí. Un par de personas me preguntaron que sucedió, me di cuenta de que me perdí varios eventos, traté de ponerme al corriente revisando los perfiles de personas importantes y continué con mi vida.
Si ahora paso más de 20 minutos en Facebook (con la pestaña de Facebook en primer plano) en todo el día es mucho, siento que tengo más tiempo y curé esa dependencia virtual que tenía.
Tal vez deberían intentarlo.
Publicado por Julio Montaño el 23/Feb/2015.